Guía básica para sobrevivir en Naval Action (y no rendirte en la primera semana)
El Naval Action no es un juego sencillo ni está hecho para quien busca un “pin pan pun” rápido. Si lo que quieres es disparar sin pensar, mejor busca otro puerto. Aquí todo se gana con paciencia, aprendizaje y buen viento.
Este es un juego con una curva de aprendizaje exigente. Conceptos como orzar, ceñir, barlovento, sotavento, babor, estribor o amura hay que dominarlos poco a poco, porque de ellos dependerá que acabes victorioso o flotando en astillas.
Y como si eso fuera poco, los propios desarrolladores no te lo ponen fácil: apareces en Nassau, con un cascarón, sin cañones ni un real en el bolsillo, y te sueltan al mar para apañártelas. Pero si sobrevives la primera semana, el juego te atrapa. Quien lo prueba y aguanta, se queda años… y no por casualidad.
Primeros pasos
Primero tendrás que establecerte. Aunque el juego te permite arribar a todos los puertos del mapa, sea cual sea su nacionalidad, no todos son iguales. Podrás fijar tus Bases (Outposts) solo en los que elijas y, ojo, porque solo puedes hacerlo en unos pocos. Piensa bien dónde ponerlos. El primero, sin dudarlo, será Nassau: al abrir un Outpost tendrás un almacén para guardar tus cosas y una dársena donde dejar tus barcos.
Empieza haciendo misiones. Dentro del puerto, pulsa la tecla Q y selecciona las de transporte: se trata de llevar pasajeros o cargamento de un puerto a otro. Son sencillas, dan dinero y experiencia, y con cinco o seis ya subirás tu primer nivel.
Aprovecha esos viajes para hablar con otros jugadores, ojo al chat del juego y a los privados que recibas. Aunque no podrás unirte a un clan hasta ser Capitán de Corbeta (nivel 5), sí puedes contactar con la comunidad, preguntar, aprender y hacer amigos. Naval Action es un juego multijugador, y aunque se puede jugar solo, la verdadera diversión está en formar parte de una escuadra o clan, participar en batallas de puerto y salir en flotas conjuntas.
Nada te impide integrarte en un Discord desde el primer día. Allí encontrarás capitanes veteranos dispuestos a ayudarte y a enseñarte los entresijos del juego. En el Naval somos pocos y siempre se agradece la entrada de nuevos compañeros.
Sobre los barcos
El juego cuenta con siete clases de navíos, desde los pequeños de 7ª hasta los poderosos de 1ª. Dentro de cada clase hay varios modelos, en total hay unos 65 barcos diferentes.
¿Puedes tener un 1ª el primer día? Sí, alguien puede venderlo, regalarlo o cambiarlo. Pero ¿puedes usarlo? No. Cada barco requiere un mínimo de tripulación, y tu rango de Capitán determina cuántos hombres puedes mandar. A mayor nivel, más tripulación y mejores barcos.
Tras unas cuantas misiones serás Alférez de Navío, con unos 70 tripulantes. Podrás empezar a montar cañones y enfrentarte a piratas o enemigos de otras naciones, pero prepárate: los comienzos son duros. Conviene seguir un poco más con transportes para fortalecer tu bolsillo y tu rango.
Pronto serás Teniente de Fragata, con unos 100 marineros bajo tu mando. Aquí empieza lo bueno: podrás hacerte con barcos como el Mercury o el Rattlesnake, auténticas joyas para iniciarte en el combate. No olvides comprar cañones, pólvora, balas, reparaciones y medicinas en el puerto de Nassau; son tu pan de cada día en el mar.
Y ya con eso, estarás listo para zarpar. Mantén Nassau como base, navega por sus alrededores, y busca enemigos dignos con los que medirte.
El resto vendrá solo: el mar enseña, el viento guía… y la pólvora convierte a los aprendices en capitanes.